“En la Iglesia apreciamos a los sacerdotes”, expresó Mons. Bartolomé, agregó que ellos “son un regalo de Dios” y “que se entregan por todos los fieles”, por lo tanto, “queremos cuidarlos”.

El obispo también mencionó que los sacerdotes mayores tradicionalmente han sido bien cuidados y atendidos por sus familias o comunidades, y así seguirá siendo. Sin embargo, se decidió construir estos módulos para cuando tengan necesidad de un hogar.

“Queremos edificar una Iglesia donde todos nos cuidemos unos a otros, porque además cuidamos todas las etapas de la vida. Que esta edificación sirva para mejorar la calidad de vida de nuestros sacerdotes”, exclamó el obispo alajuelense.

De acuerdo con la información suministrada por la Diócesis de Alajuela, la construcción del primer módulo iniciará en los próximos días y la obra estará a cargo del ingeniero Leonel Feoli.

El Pbro. Luis Hernández Solís, encargado diocesano de comunicación, informó que cada módulo estará constituido por dos habitaciones, independientes la una de la otra, con espacio para cuidadores, baños, sala común y una estación de café.

Además, los sacerdotes podrán tener acceso a áreas de cultivo, enfermería y otros servicios que, con el tiempo, se podrán incorporar en el proyecto. También, la propiedad cuenta con un amplio espacio de zonas verdes, árboles frutales, rancho y piscina.

Casa lleva el nombre de San Juan Nepomuceno, primer patrono de la Diócesis de Alajuela y actual copatrono junto a la Virgen del Pilar. Asimismo, es el patrono del clero alajuelense. Este santo, nacido alrededor de 1340 en la actual República Checa es reconocido por sufrir el martirio tras rehusarse a romper el secreto de confesión.

Se prevé que la obra estará lista en algunas semanas para beneficio del presbiterio alajuelense. Actualmente, en la Diócesis de Alajuela hay 8 sacerdotes diocesanos que superan los 75 años de edad, mientras tanto, 10 ya superan los 65.

Un antecedente de este proyecto es la Casa del Clero en Alajuela (Centro Diocesano de Pastoral), donde se construyeron varias casitas donde han residido sacerdotes.

La Iglesia Católica no establece una edad de jubilación para los sacerdotes, de hecho, muchos continúan brindando su servicio después de los 65 años.

Para que este proyecto crezca y puedan ser atendidos muchos más sacerdotes, la Diócesis requiere de la colaboración de la Iglesia alajuelense. Si usted desea colaborar con este proyecto, puede acercarse a la Curia Diocesana de Alajuela, llamar al 2433-6005, escribir a: asomareda.asociacion@gmail.com, o hacer un Sinpe Móvil al 8558-1881.